Encuentro diocesano de secretarias parroquiales: formación, empatía y comunión

Con el afán de darles formación permanente a las secretarias parroquiales, se llevó a cabo el Encuentro Diocesano de formación y convivencia.

Acontecer diocesano, 9 de junio de 2025.- Este lunes se llevó a cabo en el obispado de Gómez Palacio un significativo encuentro de secretarias parroquiales, con la participación de 50 colaboradoras provenientes de distintas parroquias de la diócesis. La jornada estuvo marcada por un ambiente de fraternidad, aprendizaje y reflexión sobre la importancia de su servicio pastoral en la vida de la Iglesia.

El programa del día incluyó dos conferencias formativas. La primera, titulada “Comunicación pastoral más allá de la oficina parroquial”, fue impartida por el padre Armando Carlos, secretario de comunicación de la diócesis, quien animó a las participantes a vivir su labor como un auténtico puente entre la comunidad y la vida parroquial, asumiendo una comunicación que no se limite a lo administrativo, sino que sea cercana, humana y evangelizadora.

Posteriormente, el padre Juan Fernando Arellano, administrador parroquial de San Pedro del Gallo, abordó el tema de la empatía, subrayando la importancia de escuchar, comprender y acoger con caridad a quienes acuden a las oficinas parroquiales, reconociendo que muchas veces llegan con heridas o necesidades profundas.

Además de las conferencias, se llevó a cabo un ejercicio de “conversación en el Espíritu”, una dinámica de escucha y discernimiento comunitario en la que las secretarias compartieron los retos, desafíos y aprendizajes que enfrentan en su labor cotidiana. Este espacio permitió fortalecer la comunión entre las participantes y renovar el sentido de misión que anima su servicio.

Este tipo de encuentros responden al compromiso de la diócesis con la formación humana y espiritual de quienes colaboran en las parroquias, así como a la necesidad de crear espacios de acompañamiento y apoyo mutuo. Las secretarias parroquiales, muchas veces en la primera línea de acogida, son un rostro visible de la Iglesia en la vida diaria de nuestras comunidades.

La diócesis agradece profundamente la dedicación y el testimonio de todas las participantes, y reafirma su deseo de seguir caminando juntos en la construcción de una Iglesia más cercana, empática y en salida.